El curioso caso de las ovejas turista
El paso constante de los animales por los contadores automáticos dispara la afluencia al Parc Natural de Llevant
Los números cambian según quién maneje las estadísticas. Desde la dirección del Parc Natural de Llevant, en 2008 visitaron el espacio público 16.673 personas, casi 2.000 más que el los dos años anteriores. Para la gerencia del Consorci de Finques Públiques del mismo parque, fueron más de 18.000 ya en 2007, "y suponemos que aumentó el año pasado, pero existen dos entradas y es muy complicado controlar el flujo", indica su responsable, Maria Antònia Sureda.
El problema de todo ello no es otro que el goteo despreocupado –pero constante– de ovejas por encima de los contadores metálicos, enterrados en el acceso principal a las fincas y que ha terminado por multiplicar exponencialmente las cifras turísticas.
"Normalmente una misma persona queda ´marcada´ dos veces, una al entrar y otra cuando abandona los terrenos, por lo que debemos dividir el total por la mitad", señalaba ayer uno de los técnicos responsables. Asumidas tradicionalmente las cifras del Parc como "estimaciones", las de 2008 deberán tomar otras acepciones o admitir a los mamíferos en sus cálculos y dividir (esta vez al menos por cuatro) el número indicado en el contador.
Sí que hay coincidencia en cambio en los usuarios que disfrutaron el año pasado de los tres refugios y la zona de acampada diseminados por parque natural: 3.943 personas durmieron s´Arenalet, la Casa de s´Alzina o la Caseta dels Oguers.
Por lo que respecta a la procedencia de los visitantes, se constata el alto porcentaje del turismo nacional que alcanza hasta el 90% del total, de los cuales a su vez, el 80% son mallorquines, "Pese a que todavía sea una zona poco conocida", según Sureda.
El problema de todo ello no es otro que el goteo despreocupado –pero constante– de ovejas por encima de los contadores metálicos, enterrados en el acceso principal a las fincas y que ha terminado por multiplicar exponencialmente las cifras turísticas.
"Normalmente una misma persona queda ´marcada´ dos veces, una al entrar y otra cuando abandona los terrenos, por lo que debemos dividir el total por la mitad", señalaba ayer uno de los técnicos responsables. Asumidas tradicionalmente las cifras del Parc como "estimaciones", las de 2008 deberán tomar otras acepciones o admitir a los mamíferos en sus cálculos y dividir (esta vez al menos por cuatro) el número indicado en el contador.
Sí que hay coincidencia en cambio en los usuarios que disfrutaron el año pasado de los tres refugios y la zona de acampada diseminados por parque natural: 3.943 personas durmieron s´Arenalet, la Casa de s´Alzina o la Caseta dels Oguers.
Por lo que respecta a la procedencia de los visitantes, se constata el alto porcentaje del turismo nacional que alcanza hasta el 90% del total, de los cuales a su vez, el 80% son mallorquines, "Pese a que todavía sea una zona poco conocida", según Sureda.
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