Unos 200 pacientes, tratados con extracto de cannabis
Los médicos han empezado a solicitar el uso compasivo de Sativex
ANTONIO GONZÁLEZ - Madrid - 14/08/2008 20:44
La Agencia Española de Medicamentos, dependiente del Ministerio de Sanidad, ha emitido hasta el momento unas 200 autorizaciones para el uso compasivo o como medicamento extranjero de Sativex, un fármaco derivado del cannabis que todavía no está autorizado en España, según informaron a Público fuentes del departamento.
El uso compasivo se pide cuando el médico considera que el paciente no tiene otra alternativa que un opción terapéutica todavía no autorizada, mientras que la solicitud de tratamiento como medicamento extranjero se realiza cuando alguien necesita un fármaco no aprobado en España pero sí en otro país.
Así, la Agencia ha autorizado Sativex, fabricado GW Pharmaceuticals, para tratar el dolor neuropático en esclerosis múltiple –indicación para la que el medicamento está aprobado en Canadá–, y para abordar los síntomas del síndrome de anorexia caquexia de los pacientes con sida y el uso antiemético en pacientes tratados con quimioterapia.
Las autorizaciones han recibido luz verde después de que en diciembre concluyera con resultados positivos un programa piloto realizado en Catalunya para estudiar le efectividad del fármaco pacientes que no respondían a los tratamientos de referencia.
“Ahora cualquier paciente puede pedirlo en España a través de un servicio de farmacia” para uso compasivo o como medicación extranjera, explica por su parte Rafael Borrás, del Colegio de Farmacéuticos de Barcelona, uno de los expertos que participó en el ensayo catalán.
Al margen de los pacientes del estudio que siguen recibiendo Sativex, Borrás explicó que los médicos que han visto que con los fármacos ya comercializados en España los enfermos no responden “están buscando otra opción, que bien controlada puede dar resultados positivos en algunos pacientes”.
Ensayos clínicos en marcha
Según fuentes de la Agencia, antes del ensayo catalán, en 2006, el laboratorio español Almirall solicitó autorización para comercializar el fármaco, pero fue denegada porque entonces “no existían evidencias suficientes” de su eficacia.
Pero, pese a la negativa, “se sigue investigando y autorizando su uso compasivo o como medicamento extranjero a petición de especialistas y de un hospital porque no se necesita la misma evidencia para autorizar una soliciud individual para un paciente concreto sin otra alternativa que para autorizar un medicamento con una indicación general”.
El uso compasivo se pide cuando el médico considera que el paciente no tiene otra alternativa que un opción terapéutica todavía no autorizada, mientras que la solicitud de tratamiento como medicamento extranjero se realiza cuando alguien necesita un fármaco no aprobado en España pero sí en otro país.
Así, la Agencia ha autorizado Sativex, fabricado GW Pharmaceuticals, para tratar el dolor neuropático en esclerosis múltiple –indicación para la que el medicamento está aprobado en Canadá–, y para abordar los síntomas del síndrome de anorexia caquexia de los pacientes con sida y el uso antiemético en pacientes tratados con quimioterapia.
Las autorizaciones han recibido luz verde después de que en diciembre concluyera con resultados positivos un programa piloto realizado en Catalunya para estudiar le efectividad del fármaco pacientes que no respondían a los tratamientos de referencia.
“Ahora cualquier paciente puede pedirlo en España a través de un servicio de farmacia” para uso compasivo o como medicación extranjera, explica por su parte Rafael Borrás, del Colegio de Farmacéuticos de Barcelona, uno de los expertos que participó en el ensayo catalán.
Al margen de los pacientes del estudio que siguen recibiendo Sativex, Borrás explicó que los médicos que han visto que con los fármacos ya comercializados en España los enfermos no responden “están buscando otra opción, que bien controlada puede dar resultados positivos en algunos pacientes”.
Ensayos clínicos en marcha
Según fuentes de la Agencia, antes del ensayo catalán, en 2006, el laboratorio español Almirall solicitó autorización para comercializar el fármaco, pero fue denegada porque entonces “no existían evidencias suficientes” de su eficacia.
Pero, pese a la negativa, “se sigue investigando y autorizando su uso compasivo o como medicamento extranjero a petición de especialistas y de un hospital porque no se necesita la misma evidencia para autorizar una soliciud individual para un paciente concreto sin otra alternativa que para autorizar un medicamento con una indicación general”.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada